Los empresarios de Quintana Roo están enojados por los métodos que el Niño Verde, Jorge Emilio González Martínez, utiliza para aumentar su poder económico y político en el estado, desde el Ayuntamiento de Benito Juárez.
La columna Templo Mayor, del diario Reforma de la Ciudad de México, publicó hoy que ese descontento empresarial llegó a oídos del propio Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, en su visita a Cancún la semana pasada.
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El descontento empresarial se suma a la reacción de importantes grupos de priistas que no quieren quedar supeditados a los amarres políticos electorales que El Niño Verde realiza sobre el estado desde la Ciudad de México, o en sus visitas de fines de semana a Cancún.
Aquí la transcripción de la mencionada columna:
“Como si los empresarios de Cancún no tuvieran suficiente con la inseguridad y el derecho de piso del crimen organizado, ahora también enfrentan el “derecho de agua” que les imponen delincuentes mejor organizados: los del Partido Verde.
Resulta que la iniciativa para prohibir los delfinarios no busca proteger a los animalitos, sino ahogar al dueño de los principales centros de nado con delfines en Cancún. ¿Por qué? Porque el empresario no acepta entrar al aro de Jorge Emilio González Martínez, el ya no tan Niño Verde.
Tan grave es la cosa que ya Miguel Osorio Chong recibió quejas de varios empresarios locales contra el Partido Verde que gobierna Cancún.
Por lo pronto, diputados opositores e inclusive algunos del PRI se unieron para frenar la iniciativa en San Lazaro.
Como quien dice, más que delfines es un asunto de Tiburones Verdes….”. (La Opinión de Quintana Roo)