Las palabras de Donald Trump este jueves, ha calado hondo a la comunidad internacional. Y no es para menos: ha anunciado que su país se retira del Acuerdo de París sobre el cambio climático, ratificado por 195 países en la capital de Francia en diciembre de 2015. Eso ocasionó una caída del dólar que se ubicó esta mañana en México 18.62. Las casas de cambian pagaban por el billete verde hasta a 17.28 pesos.
El portal RT informó que las palabras del mandatario cayeron como balde de agua fría en un mundo donde el calentamiento global avanza de manera galopante. «Con el fin de cumplir con mi solemne deber de proteger EE.UU. y sus ciudadanos, EE.UU. se retirará del Acuerdo de París», ha declarado el mandatario estadounidense. Ha agregado que EE.UU. iniciará las negociaciones para volver a formar parte del acuerdo u otra iniciativa similar «bajo condiciones justas» para su país.
En su versión actual, para EE.UU. el Acuerdo de París supone «desventajas» en «beneficio exclusivo de otros países» y genera «pérdidas de puestos de trabajo, sueldos bajos, el cierre de fábricas y una inmensa disminución de la producción económica», ha recalcado Trump.
Tras tachar el pacto actual de «injusto», el mandatario ha señalado que «cualquier nuevo acuerdo tendrá que repartir las cargas y responsabilidades de manera equitativa entre las naciones del mundo».
Para reforzar su decisión, Trump ha citado una publicación reciente del diario económico ‘The Wall Street Journal’, que aesguraba que «retirarse» del Acuerdo de París «es por el interés económico de EE.UU. y no afectará tanto al clima». Ha agregado que bajo su Administración EE.UU. «seguirá siendo el país más limpio y respetuoso con el medioambiente».
¿Qué es el Acuerdo de París?
El Acuerdo de París estipula cómo limitar el desarrollo del cambio climático y desacelerar el calentamiento de la Tierra, con el objetivo a largo plazo de mantener el aumento de la temperatura media mundial muy por debajo de 2 °C sobre los niveles preindustriales y limitar el aumento a 1,5 °C.
Para que entre en vigor, al menos 55 países que representan un mínimo del 55 % de emisiones de gas de efecto invernadero tienen que ratificarlo, aceptarlo o aprobarlo, unos números elegidos para asegurar la participación de los lugares más contaminantes —sobre todo China, EE.UU. y la UE— sin poner límites muy estrictos para evitar retrasar el proceso.
La decisión de abandonar el acuerdo tomada por el inquilino de la Casa Blanca se vio reforzada por una reciente carta firmada por 22 senadores republicanos, en la que solicitaban abandonar el pacto, y ha indignado tanto a la comunidad científica como a gran parte de la clase política mundial.
«Un acto brutal»
El comisario de la Unión Europea de Acción por el Clima y Energía, Miguel Arias Cañete, estima que este documento no solo beneficia al medio ambiente, sino que supone un «motor de crecimiento» para crear nuevos empleos y oportunidades de inversión.
Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha subrayado este martes que la evidencia científica detrás del cambio climático «está fuera de toda duda».
La decisión de Trump también ha sido criticada por distintos líderes mundiales. Asimismo, el primer ministro de Bélgica, Charles Michel, la ha calificado de un «acto brutal». «El liderazgo significa luchar contra el cambio climático juntos. No renunciar al compromiso», ha señalado en su cuenta de Twitter.
El primer ministro de Italia, Paolo Gentiloni, la canciller alemana Angela Merkel y el presidente de Francia, Emmanuel Macron, han expresado en un comunicado conjunto citado por Reuters su «firme» convicción de que el Acuerdo de París «no puede ser renegociado, dado que es una herramienta vital para nuestro planeta, sociedades y economías».
El expresidente de EE.UU., Barack Obama, se ha mostrado crítico y ha afirmado que con esta decisión la actual Administración de la Casa Blanca «se une a un pequeño puñado de países que rechazan el futuro».