Durante el sexenio de Roberto Borge, Quintana Roo fue refugio para prófugos de la justicia. El ex gobernador de Tamaulipas buscado por autoridades mexicanas y estadounidenses por lavado de dinero, encontró en Cancún el paraíso para esconderse, esto con la protección del también ex gobernador quintanarroense ahora preso y quien fuera su esposa, Mariana Zorrilla. Eugenio Hernández, su esposa Adriana González Lozano y dos acompañantes más fueron tratados como reyes, conviviendo con la socialité del Estado, organizandose fiestas sin discreción. Junto con Borge se burlaron de la justicia.
Pedro Canche publica esta información Por autorización expresa de Luces de Siglo
Ni la reciente detención y encarcelamiento de Mónica Andrea Roca Pérez por la justicia estadounidense mete miedo a otros de los implicados en la red de lavado de dinero por el que se persigue al ex gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores.
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Desde que “Geño” –como se le conoce en la clase política de Ciudad Victoria– dejó la gubernatura de Tamaulipas en diciembre de 2010, se trasladó a vivir a uno de sus departamentos de la Torre Emerald del bulevar Kukulcán de la zona hotelera de Cancún. Con él llegaron su esposa Adriana González Lozano con su ex secretaria particular Mónica Andrea Roca Pérez, su ex secretario de Administración Alejandro Jiménez Riestra, así como el poderoso empresario Farough Fatemi Corcuera, quienes durante todo este tiempo gozaron de la protección del gobierno de Roberto Borge en Quintana Roo.
La felicidad de la familia Hernández González se acabó en mayo de 2012, cuando la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) ordenó asegurar diversos bienes del ex gobernador, diez de ellos en Cancún, Playa del Carmen y en la zona continental de Isla Mujeres.
Desde entonces, “Geño” desapareció de la vida pública de Cancún y actualmente es considerado prófugo de la justicia mexicana y estadounidense. Su esposa, en cambio, se quedó a vivir en su residencia de Puerto Cancún y fue bien recibida por la socialité local y llegó a ser parte de las damas de honor del DIF estatal que entonces presidía Mariana Zorrilla de Borge.
El 15 de septiembre de 2015, Adriana González realizó una esta en su residencia de Puerto Cancún con motivo de su cumpleaños y estuvo presente su amiga Andrea Roca, encarcelada actualmente por lavar dinero del matrimonio, según las acusaciones que obran en su contra. Las imágenes y el relato de aquella emotiva noche fueron publicados en la revista local de sociales Cancuníssimo, que quedaron como una muestra de la protección que estos personajes recibieron en el gobierno pasado y se codearon con familias del poder local. Mónica Andrea Roca Pérez fue detenida en el aeropuerto de Los Ángeles, California, cuando se disponía viajar a Monterrey, Nuevo León, luego de visitar a uno de sus hijos que radica en la ciudad estadounidense. Roca Pérez es señalada por el Gobierno de Estados Unidos de Norteamérica como blanqueadora de dinero del ex gobernador Eugenio Hernández Flores y de la esposa de este, Adriana González Lozano.
Tras ser capturada, Roca Pérez fue trasladada a Corpus Christi, donde se sigue el maxiproceso contra el ex gobernador tamaulipeco, familiares, amigos y otros prestanombres que saquearon el erario de Tamaulipas. El empresario Fatemi Corcuera también vive tranquilamente en Cancún; aquí acostumbra frecuentar los cafés y restaurantes de la clase política local, donde es ampliamente conocido y hasta respetado.
