Por: Silvia Nuñez
Las mentiras de la FGE sobre el caso Génesis
Génesis Deyanira Urrutia Ramírez, regresó a su natal Jáltipan, lugar que la vio nacer y morir, a sus cortos 22 años. Su arribo congregó de forma multitudinaria a familiares, amigos y población en general. La expresión de consternación e incredulidad en los rostros de los asistentes se reiteraba: imposible concebir que en el féretro de color blanco, yacía su cuerpo inerme, completo… y no mutilado como grotescamente había sido descrito y como tal, filtrado a los medios de comunicación, el 8 de octubre del presente, a través de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Los cuerpos mutilados que fueron hallados en Camarón de Tejeda y que también reposaban en Servicios Periciales del Estado, eran de cinco personas, que aparentemente provenían de las citadas bolsas negras que habían sido halladas en el citado lugar, un día antes.
“Mi hija estaba completa. El fiscal que nos atendió ahí [refiriéndose al director general de Servicios Periciales de la FGE, Gilberto Aguirre Garza] nos dijo: _Señora, a su hija la respetaron, su niña era inocente de todo, igual que Leobardo (…) Su cuerpo nos fue entregado sin ningún tipo de mutilación, ella estaba completa (…) _Los cuerpos que estaban en Servicios Periciales, eran cinco: cuatro hombres y mi niña. Los cadáveres de Leobardo, Octavio, el cuerpo no identificado (…) que se piensa es de Andrés y otro más, -que según el fiscal era de un taxista-. Los de ellos estaban también completos, sólo les faltaba parte de una pierna (…) Las piernas sí estaban, pero según nos dijeron que no correspondían a los cuerpos, y por lo tanto, a Leobardo y Octavio los entregaron sin ellas [las piernas] a sus familiares (…) Mi esposo fue quien la identificó, porque yo no tuve las fuerzas para hacerlo (…). Edgar me dijo: _es nuestra niña y está completa, completa”.
Un dato importante, y especialmente preocupante, que se omitió hasta ahora. Y que el gobierno de Javier Duarte, a través de Luis Ángel Bravo Contreras, ocultó: ¿Con qué finalidad? Ante lo cual, podríamos formularnos la siguiente pregunta importante:
¿Los cuerpos que encontraron en Camarón de Tejeda, no correspondían a los cuerpos de Génesis, Leobardo y Octavio? Lo anterior, también generan las siguientes suspicacias: ¿Los cuerpos de los universitarios desde cuándo se encontraban en Servicios Periciales? ¿Cuál fue la causa de la tardanza para la entrega? Podemos advertir, que al tergiversarse la información, es a todas luces un intento por modificar la percepción en la sociedad con respecto a las causas reales de la muerte de los jóvenes universitarios, y por tanto, una canallada más de este gobierno.
“Según lo que nos dijo el fiscal, el único cuerpo que presentaba impacto de bala era el de Octavio (…) Nos dijo que tenía el tiro de gracia (…) Leo y mi hija no. No determinaron cuál fue la causa de su muerte, cuando nos entregaron los cuerpos. Nos dijeron que después –no determinaron cuándo- entregarían los resultados de las causas de su muerte, pero sus cuerpos no presentaban laceraciones de proyectil (…) La mamá de Octavio nos dijo que era mentira que su hijo tuviera impactos de bala (…) Yo no entiendo la causa de la mentira, de decir que nuestros hijos estaban desmembrados (…) Hace poco, un medio de comunicación de Xalapa nos entrevistó, (…) creo que es Gráfico o Crónica de Xalapa, no me acuerdo; pero nos dio mucho coraje, pues en la entrevista mi esposo les dijo que era mentira que a mi hija nos la hayan entregado en pedazos, desmembrada pues y ese medio, pese a la entrevista, siguió con la mentira, prosiguió con la postura que filtraron a los medios de comunicación, y eso sí me molesta mucho” dijo Ramona, madre de Génesis al borde del llanto
Cómo una reina
Génesis era muy querida en Jáltipan. Derivado de que Ramona y Edgar –sus padres- son docentes del COBAEV de la zona 7 y 8, sus compañeros tuvieron la oportunidad de verla crecer. El presidente municipal de Jáltipan, Miguel Ángel Baena Viveros, luego de que Génesis había sido novia de uno de sus primos, la conocía y desde entonces, le tenía una gran estima, por lo que no reparó ni un instante en brindar todo el apoyo a la familia para agilizar los trámites en el panteón municipal.
“Era una niña que se ganaba el cariño de todos, creció dentro de este contexto” reitero la madre. A causa de ello, tanto en el velorio, la Misa de Cuerpo Presente y en su sepelio; los maestros y autoridades del COBAEV asistieron sin problema alguno, luego de que el sindicato solicitó a las autoridades competentes, para que se diera la suspensión de actividades por la mañana, en el día del entierro.
“Era sorprendente el exagerado número de compañeros, de habitantes de mi pueblo y amigos, que se dieron cita para acompañarnos en despedir a mi hija (…) Hubieras visto Silvia, el cortejo fúnebre al panteón municipal de Jáltipan, fue realmente hermoso, como ella merecía ser llevada (…) Adelante iba la banda de guerra del Plantel número 17 del COBAEV en dónde ella estudió (…) Hubieras visto, todos vestidos de gala para mi hija, elegantísimos (…) Atrás de ellos, la carroza, mi nena (…) Yo me negué a ir arriba en la carroza y caminé con Edgar atrás de ella, atrás de nosotros, el Mariachi y luego, las personas que nos acompañaron a este difícil final”
Ramona Ramírez Ureña es maestra de teatro y brinda apoyo terapéutico a los jóvenes de su plantel. “Sé que debo trabajar el luto, tengo mucho coraje, mucha rabia de la forma como le cegaron la vida a mi hija (…) Muchos de mis compañeros me dicen que al igual que Génesis, soy guerrera, y por ella tengo que salir adelante (…) También sé que tengo que continuar los sueños y los proyectos que ella tenía (…) Ella se preocupaba mucho por la gente Silvia, ella me decía: _Mamá quiero hacer una asociación para alimentar a las personas de bajos recursos, a los niños (…)_ También me dijo que quería dar cursos gratis de habilidad lectora para incentivar, a niños y jóvenes (…) También sé que tengo primero que estar bien, pero le prometo a mi hija, que sus sueños los voy a llevar a cabo”.
Génesis Deyya Urrutia
9 de septiembre ·
A las gacelas les crecieron alas, y a la pistola que me apuntaba tan desafiante se le acabaron las balas. Te pedí que no esperarás a que contestará tus iras, no te va a gustar mi movimiento, juego ajedrez desde niña. #GDUR