Madre desespera pide ayuda
Ha sido notificada por el comité del sindicato de trabajadores del municipio de Benito Juárez de Cancún -supone ella- que para hacerla renunciar a su trabajo, lo que es su única fuente de ingreso para mantener a su hija y es hostigada por la lider sindical madre de su ex pareja quien ya le quitó la custodia de su hija menor
Ella acudió a éste medio informativo virtual por ahora -El Reportero- para que se de a conocer su situación y describe lo siguiente:
Soy Perla Rodríguez
Soy madre de cuatro hijos, trabajo en el palacio municipal desde hace 12 años con eso he podido mantener a mi familia dignamente. Sucede que mis dos hijas menores son nietas de Delia Alvarado.
Tuve una relacion de casi ocho años con el papa de mis hijas se llama Siddarta Sainz Alvarado y llevo varios años batallando porque han hecho hasta lo imposible para crear comflictos en mi vida y por consecuencia la de mi familia.
El 15 de marzo la magistrada Mariana Davila dictó sentencia a favor del padre quitándome la custodia de mi bebé de dos años algo totalmente incoherente porque sucede que yo tengo la custodia de mi otra hija de 6 años.
Acto seguido han estado hostigando laboralmente ya que soy personal sindicalizado y el día de hoy me notificaron que me tengo que presentar en las oficinas del sindicato frente a un comite quienes pretenden quitarme la base sindical de muchos años de trabajo para que asi ya no pueda ni tenga con que mantener a mis hijos.
Delia Alvarado es actualmente la diputada de grupos vulnerables por el PRI Sustituyendo a Susy Hurtado y no dejado el cargo vitalicio del Sindicato del ayuntamiento de Benito Juárez.
El asunto es que necesito apoyo tambien para mañana en el sindicato. He publicado mi situacio en el face sin poner nombres y por eso me armaron un comite donde dicen que violento al sindicato
CANCUN.— Empleados que se reintegraron a la Dirección de Fiscalización, donde está su base laboral, revelaron que han sido advertidos por el director Raymundo López Martínez, que estarían a prueba, pese a que todos ellos fueron relegados a otras áreas durante el trienio de Julián Ricalde, porque no estaban de acuerdo con las manipulaciones de sus delegados sindicales y tampoco se prestaban para corruptelas por parte de un grupo de inspectores élite que hoy se aprestan para “operar” directamente con el titular de la dependencia.
La fuente indicó que son alrededor de 20 trabajadores, entre sindicalizados y de confianza, quienes al principio de esta administración regresaron a la Dirección de Fiscalización donde originalmente fueron contratados por el Ayuntamiento, aunque todos ellos fueron cambiados a otras dependencias principalmente por no ceder ante el “modus operandi” de Siddartha Sáenz Alvarado, hijo de la líder del Sindicato Unico de Trabajadores al Servicio del Ayuntamiento Benito Juárez (SUTSABJ) Delia Alvarado, ya que a decir de la fuente, es quien controla “desde afuera” a los inspectores afiliados al gremio de burócratas.
En este sentido, se confirmó que dicha situación, lamentablemente aún prevalece en esta nueva administración municipal a cargo Raymundo López, porque de hecho el que tiene el mando operativo actualmente es Alfredo Serrano, ex guarura de Delia Alvarado y gente de confianza de Siddartha Sáenz, quien por cierto conserva su plaza en dicha oficina recaudatoria, aunque desde hace casi un año no se presenta a trabajar y prácticamente funge como uno de los cientos de “aviadores” apenas exhibidos desde la Oficialía Mayor, pero con la gran diferencia de ser el vástago de la líder del SUTSABJ.
Los empleados que apenas regresaron a esta dependencia, están a la expectativa de las instrucciones de López Martínez, muchos de ellos no tienen funciones asignadas y se la pasan sentados en espera de alguna tarea, mientras deambulan afuera de la Dirección.
Sin embargo, al parecer Raymundo López se ha visto obligado a “pactar” con el SUTSABJ, tan sólo por el hecho de haber aceptado como “segundo de a bordo” a Alfredo Serrano, pero sobre todo porque tolera que personal sindicalizado continúe ejecutando funciones de inspección fiscal, siendo ésta una tarea exclusiva para personal de confianza, ya que de caer en actos de extorsión o abuso de autoridad, cohecho, etc; podrían ser sancionados, turnados a la contraloría o cesados, a diferencia del personal sindicalizado que tiene el respaldo de su gremio y de su jefe “tras bambalinas”, Sidartha Sáenz.
La incertidumbre del personal de fiscalización estriba en la muy probable decisión de ser reasignados nuevamente, bajo cualquier pretexto, y tan sólo para evitar que entorpezcan las estrategias de recaudación “extraordinarias” que ya se están reorganizando entre el personal sindicalizado y en la que estaría implicado directamente Raymundo López Martínez.(*Luis Mis) 
