Por: RT News*
Tres menores de edad peruanos -dos de 11 años y uno de 15- fueron víctimas durante años del maltrato y las torturas de sus padres adoptivos de origen estadounidense. Los agresores, Jim y Paige Nachtigal, son una pareja de misioneros del Estado de Kansas, que enfrenta actualmente 12 cargos por la violencia ejercida contra estos niños.
Si bien la adopción se llevó a cabo en 2012, la causa salió a la luz el 5 de febrero de este año cuando el mayor de los jóvenes se escapó de su casa y sus padres denunciaron la desaparición. Al ser encontrado por la policía durante la madrugada el menor señaló que «no quería volver a su casa, que había pecado y que no había hecho las tareas», explicó Randy Jordan, jefe policial. Estaba «aterrado», aseguraron los oficiales.
Ante esta situación los agentes decidieron llevar al niño a casa de su tía quién declaró: «He visto cómo Paige les negaba comida, los he visto hambrientos, ella los obligaba a fregar el piso del garaje y de la cocina como castigo». Allí comenzó la investigación que sacó a la luz la verdad.
La detención
Menos de una semana después de la fuga del mayor de los niños, el juez Joe Dickinson ordenó la detención Jim y Paige Nachtigal. La decisión del magistrado llegó luego de recoger testimonios de otros familiares y vecinos así como también de los informes médicos.
Estos últimos señalaron que uno de los menores de 11 años sufrió una rotura de brazo alrededor del 9 de diciembre de 2015 y una rotura de costilla entre setiembre y diciembre del mismo años. La niña de la misma edad sufrió rotura de brazo entre setiembre y diciembre de 2015 y rotura de los dedos y costilla en enero o febrero de ese mismo año. Finalmente, el fugado tenía secuelas de una fractura de dedo entre diciembre y enero del 2015 y fractura de pierna en febrero del mismo año.
Por estos motivos Jim Nachtigal, está acusado de tres cargos por presuntamente impartir castigo corporal cruel e inhumano. También cuenta con dos cargos de abuso de menores por supuestas torturas y golpes a cada uno de los menores de 11 años entre el 2014 y el 2016; y siete cargos de agresión agravada. Paige Nachtigal está acusada deabuso infantil y enfrenta también siete cargos por complicidad con su marido en la comisión de las presuntas agresiones.
El rol del Estado
Tras haber pagado una fianza los acusados esperan ahora el juicio en libertad. Por su parte las víctimas «han sido ubicadas en familias temporales debidamente registradas en el estado de Kansas», aseguró la Dirección General de Adopciones del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) de Perú. «Los tres reciben tratamiento médico y psicológico de acuerdo a sus necesidades y serán reincorporados a la escuela en un programa de tratamiento especial por encontrarse rezagados en los estudios», añadió el organismo.
Más allá de estas acciones tomadas cuando el caso cobró estado público, surge la pregunta de respecto a los mecanismos de control sobre las familias receptoras de menores adoptados. De acuerdo con los protocolos de la Dirección General de Adopciones del MIMP, se debe realizar un seguimiento postadoptivo para saber si el menor se encuentra en buen estado. Para el caso de adopciones nacionales, el seguimiento es de 3 años y para las internacionales de 4 años. Sin embargo las autoridades peruanas aseguran que tomaron cartas en el asunto cuando se hizo la denuncia en febrero de 2016.
Las adopciones de la familia Nachtigal se tramitaron a través de las agencias Lifeline y Villa Hope. Las mismas fueron acreditadas por la Council on Accreditation (COA), que determinó que la pareja -en aquel entonces misionando en el país sudamericano- estaba apta para adoptar niños y niñas de Perú.
Según las autoridades estadounidenses los tres menores son considerados ciudadanos de los EE.UU., por lo cual tienen derecho a los mismos beneficios que cualquier otro ciudadano. Es así que el gobierno norteamericano asume el compromiso de garantizar de ahora en más el bienestar y protección de todos ellos.