Los principales tres partidos políticos de México; el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) se preparan para el cambio de dirigente en sus organizaciones políticas con miras al 2018.
La carrera presidencial rumbo al proceso electoral de 2018 en México ha comenzado y las diversas fuerzas políticas del país lo saben, por lo que el PRI buscará mantenerse en el poder para proseguir con su proyecto transexenal y los partidos de oposición han emprendido sus estrategias estructurales al interior de sus instituciones políticas con los objetivos de tomar fuerza en los procesos electorales intermedios de 2016.
Por su parte el Partido Revolucionario Institucional (PRI) ha anunciado la presentación de la “candidatura única” para la dirección del partido en el poder, en la persona de Manlio Fabio Beltrones para Presidente del Partido y Carolina Monroy Del Mazo como Secretaria General.
Este es un contexto tradicional en el PRI donde se decide al dirigente sucesor entre las cúpulas del Partido y tras bambalinas para después hacer el anuncio oficial. Según información publicada por el universal, se señala que la decisión fue del Presidente Peña Nieto lo que sorprendió a propios y extraños al elegir a Manlio F. Beltrones por ser ajeno a su grupo político al interior del PRI.
Sin embargo, en la segunda posición jerárquica dentro del PRI será ocupada por Carolina Monroy Del Mazo, quien si pertenece al “Grupo Atlacomulco”, que es el grupo al cual pertenece el Presidente y es familiar del mandatario Enrique Peña Nieto, según información de CCN.
Por su lado el Partido Acción Nacional (Partido que goberné 2000-2012) desarrolló su elección interna el día de ayer con una participación menor al 50% de los miembros activos y el ganador con el 81% de los votos fue Ricardo Anaya, quien es un hombre cercano al actual dirigente, Gustavo Madero, por lo que existirá una continuidad en la dirección de este organismo político, autodenominado como de centro derecha y que ha respaldado en el Congreso Mexicano todas las reformas estructurales.