Por Pedro Canché
24/octubre/15 20:41 horas
Dedicado a radionewred.com
El escenario previsto por el Presidente Enrique Peña Nieto y su gabinete era oscuro,de terror.Patricia,el super Huracán monstruo de tamaño nunca visto desde que se comenzó a llevar registros en 1959 era el viento desastroso que iba a opacar Ayotzinapa,Tlatlaya ,Aquila y tantos casos ventilados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) .
Las investigaciones y auscultaciones al Ejército e Instituciones por el El Grupo Interdisciplinario de Expertas y Expertos Independientes (GIEI) tal vez iban a quedar en anécdota.Un terremoto de grandes magnitudes como el de 1985 o una devastación como se esperaba sencillamente sería borrón y cuenta nueva en un país emocionalista,educado así por las televisoras a olvidar como si cada cacho de historia del país fuera una novela más y cuya manejo mediático sería series repetidas que aburren y aburren.Y pues «hay que superar » como dice Peña Nieto o darle vuelta a la hoja como dicen los militares.
Sin embargo,los 43 estudiantes de Ayotzinapa no se olvida ni se superará nunca hasta que haya una verdad que no sea la verdad histórica .Los mexicanos pensantes,esos cuyas ideas son el dolor de cabeza de la plutocracia y la juiorcracia ,del sistema podrido mexicano seguiremos insistiendo sin cansarnos .Hay 6 muertros y varios heridos,uno que aún está en coma y 43 que no aparecen.
Lo mediático de la fuga y la otra fuga del Chapo Gusmán y el show apocalíptico de Enrique Peña Nieto con el huracán Patricia no borran o quitan de la agenda principal el tema de un país donde se practica la tortura y desaparición forzada y la detenciones y encarcelamientos arbitrarios y que la CIDH y la Organización de las Naciones Unidas ( ONU) han puesto el dedo en el sistema político mexicano sin que estos y el copetudo se despeinen.
No hay verguenza,la dignidad la han perdido.Somos las verguenza mundial y los conductores de la nación simplemente minimizan estos asuntos al grado tal que se enfrentan con verborrea a estas entes internacionales como cuando criticaron el informe de Juan Méndez del Comité contra La Tortura de la ONU o contra el informe de la CIDH que fue minimizado por un gobierno en abierta crisis en el tema de los derechos humanos..y otros por supuesto.
Pero Patricia no quiso lavar los pecados de Enrique Peña Nieto. Hasta ahora este super huracán solamente han sido minimos los daños,según CNN por ejemplo..Lo medíatico del manejo que aspiraba el Presidente simplemente se le esfumó.Este huracán de plano no quiso ,se rehusó aa lavar los pecados de Enrique Peña Nieto y de una nación que tiene que rendir cuentas por su indiferencia.De una nación que tiene que ordenar y tomar su papel como jefes de esos politicos que solo les interesa el poder y el dinero.Es hora de sustituirlos.